En sesión extraordinaria del CORE se aprobó la propuesta para que el ejecutivo (intendente) destine los fondos del 5% del FNDR

Solicitarán también declarar al Tamarugal como “zona de catástrofe”

CORE ACORDO SOLICITAR EL 5% DEL PRESUPUESTO REGIONAL, 2.100 MILLONES DE PESOS, PARA APOYAR A COMUNIDADES AFECTADAS POR LLUVIAS ESTIVALES

 

El Consejo Regional, en sesión plenaria desarrollada la tarde de ese jueves, acordó por unanimidad solicitar al Gobierno Regional, que destine los recursos del 5 por ciento del Presupuesto Regional, para ir apoyo de las comunidades de la Provincia del Tamarugal, que en los últimos días, han resultado afectadas por el fenómeno climatológico que impacta a la zona, desde el miércoles pasado, y que se extenderá hasta el próximo sábado 9 de febrero.

A la sesión extraordinaria del Consejo Regional, que fue auto convocada, y que encabezó el Rubén Berríos como presidente incidental, asistieron los consejeros Pablo Zambra, Felipe Rojas, Iván Pérez, Javier Yaryes, Pedro Cisternas, Rubén Berríos, Rubén López, José Miguel Carvajal, Eduardo Mamani, Verónica Aguirre y José Lagos.

El Consejo Regional acordó solicitar al Intendente, que destine el 5 por ciento del Presupuesto Anual Regional correspondiente a Emergencias, que equivale a cerca de 2.100 millones de pesos, para apoyar a la comunidades de la Provincia del Tamarugal, y que resultaron afectadas en los últimos días por las lluvias estivales.

El consejero Rubén Berríos aclaró que dichos recursos se deberán destinar exclusivamente a situaciones derivadas de emergencias, y no a itemes de reconstrucción. “Estos 2 mil millones de pesos no son para enfrentar todos los daños. Son para primera necesidad, como por ejemplo abastecimiento de agua potable, alimentación, arriendo de maquinarias para despejar caminos que llegan a localidades aisladas, etcétera”, comentó la autoridad.

En una segunda moción, el pleno del Consejo Regional acordó solicitar al Intendente que realice las gestiones necesarias, para que el Presidente de la República declare a la Provincia del Tamarugal como “zona de catástrofe”, por los daños que hasta el momento ha dejado el Invierno Altiplánico en la zona. Dicha condición facilitaría la tramitación de recursos desde el nivel central, para paliar los daños provocados por las lluvias estivales.

Finalmente, en una tercera moción, el Consejo Regional acordó una serie de medidas de apoyo, como por ejemplo, gestionar que el excedente de alimentos para mascotas que posee el GORE, se remitan a los animales de las familias afectadas en el Tamarugal, dicha propuesta fue presentada por el consejero Pablo Zambra; gestionar el transporte hacia la zona afectada de una brigada de estudiantes voluntarios de la UNAP, que se organizaron para ayudar logísticamente a los damnificados de las comunidades rurales, y necesitan transportarse hacia dichos lugares; y finalmente, se aprobó la propuesta del consejero Rubén López, de fiscalizar la condición en que quedó al infraestructura agrícola, luego de las lluvias que afectaron la zona.

Los consejeros acordaron además, volver a reunirse en las próximas horas, para monitorear las consecuencias del frente de mal tiempo que afecta al interior de la región, y para gestionar, si se requiere, mayores recursos para las zonas afectadas.

 

El sol de Iquique.cl publico una declaracion del concejero regional  José Carvajal

“Hoy lo que estamos haciendo es liberar una gran cantidad de recursos para que podamos llegar con la ayuda a cada uno de los poblados de El Tamarugal. Sabemos que estamos enfrentando emergencias (…) Lo que hacemos es darle fuerza al trabajo de los funcionarios que tendrán gasto de operación”, dijo el core Carvajal.

según informo corresponsaliquique.cl: 

El Consejo Regional, en sesión plenaria desarrollada la tarde de ese jueves, acordó por unanimidad solicitar al Gobierno Regional, que destine los recursos del 5 por ciento del Presupuesto Regional, para ir apoyo de las comunidades de la Provincia del Tamarugal, que en los últimos días, han resultado afectadas por el fenómeno climatológico que impacta a la zona, desde el miércoles pasado, y que se extenderá hasta el próximo sábado 9 de febrero.

A la sesión extraordinaria del Consejo Regional, que fue auto convocada, y que encabezó el Rubén Berríos como presidente incidental, asistieron los consejeros Pablo Zambra, Felipe Rojas, Iván Pérez, Javier Yaryes, Pedro Cisternas, Rubén Berríos, Rubén López, José Miguel Carvajal, Eduardo Mamani, Verónica Aguirre y José Lagos.

 

Marginalidad e intriga: así es la intensa serie policial sobre Alto Hospicio.

 

Este domingo debuta en Mega La Cacería: Las Niñas de Alto Hospicio, inspirada en la investigación detrás de los crímenes y con Francisco Melo como protagonista.

Un tipo veterano y algo magullado aterriza en Iquique para hacerse cargo de un caso que a ojos de las autoridades, desde policías a miembros de gobierno, no corresponde a otra cosa que fugas de hogar. Pero ese hombre, una mirada que además de venir de vuelta, es extranjera, no da crédito a la hipótesis, que habla de adolescentes que han escapado de las precariedades del pueblo para prostituirse.

El primer capítulo de La cacería: las niñas de Alto Hospiciositúa a ese personaje, el capitán César Rojas (Francisco Melo), como alguien misterioso y, a la vez, como el punto de inicio para que la investigación se conduzca hacia la turbia verdad. Pero no está solo: en la regla del policial, la historia le provee rápidamente de una dupla, el más joven y tradicional subteniente Carrasco (Gastón Salgado).

La serie, nueva gran apuesta de Mega para el prime de los domingos, que se estrena esta semana, se despliega de esa manera desde el arranque, mostrando el pedregoso camino que recorre Rojas para introducirse en una trama que atraviesa distintos estamentos. Todo bajo la dirección de Juan Ignacio Sabatini, con experiencia en adaptar hechos reales y seguir la pista del thriller, en la aplaudida serie Zamudio: Perdidos en la noche (TVN).

Si esa vez el realizador fue el primero en mirar desde la ficción la historia alrededor del homicidio de Daniel Zamudio, en esta oportunidad, a través de ocho capítulos, marca la primera vez que una serie o película toma inspiración del estremecedor caso de adolescentes desaparecidas y asesinadas a fines de los 90 en la localidad nortina.

En la temporada debut de La cacería (ganadora del Fondo CNTV en 2016) la ambición es armar un puzle en que, a la altura de las mejores ficciones sobre asesinos, se integra una amplia galería de personajes y se siembra la intriga en cada paso, con el desierto como escenario de la investigación y el horror.

Pero, al mismo tiempo la serie no olvida su base real, sumando a autoridades de la época mediante noticias o incluyendo frases que resuenan como mordaces comentarios sociales como: “si las niñas fueran rusias de Iquique y no morenas de Hospicio, ya sabríamos lo que pasó”.

“El thriller tiene una estructura que uno debe saber seguir para que ojalá sea atrapante. Pero no queríamos el policial gringo tipo CSI donde sólo importa el procedimiento. Nos interesaba el policial, pero también hablar de problemáticas sociales”, indica el guionista Enrique Videla, colaborador de Sabatini en las series Los archivos del Cardenal (TVN) y la misma Zamudio, que agrega: “Esto no se podría resolver como película de acción, no podría terminar con el policía con una metralleta acribillando al asesino”.


La base real de la serie

Por La cacería desfilan desde carabineros a padres desesperados por conocer el paradero de sus hijas, pasando por trabajadores del Sename y niñas expuestas a ser las siguientes en desaparecer (encarnadas principalmente en la banda Las Lagrimitas). Para construir eso, la primera inspiración fue el perfil escrito por el periodista Rodrigo Fluxá sobre Julio Pérez Silva, el asesino serial de Hospicio, que fue parte del libro Los malos, editado por Leila Guerriero en 2015, junto a textos sobre otros chilenos como Manuel Contreras e Ingrid Olderock.

“También nos inspiramos en cosas que él investigó que no están en el perfil, particularmente el personaje del policía que llega a Hospicio, la primera persona que hace notar que hay un asesino en serie”, dice Videla, a cargo de los guiones junto a Fluxá.

“Hay varias cosas que están ficcionadas y hay algunos hitos que aparecen. En general nos inspiramos en sucesos reales para construir una historia que tuviera relación con el policial clásico, con pistas, cortinas de humo y segundas intenciones. La historia se va abriendo y uno empieza a ver cosas sospechosas”, señala sobre un proceso que contó con la asesoría del estadounidense Jeff Rush, autor del libro Alternative scriptwriting: rewriting the Hollywood formula.

Junto a Francisco Melo, quien venía de actuar sólo en teleseries en Mega (Sres. PapisTranquilo papá) y, para estar en La cacería, decidió postergar sus vacaciones el último verano, se encuentra Gastón Salgado, visto recientemente al centro de la miniserie Martín, el hombre y la leyenda.

Pero también están Jaime Omeñaca (Zamudio), Giannina Fruttero (Ramona), Valentina Muhr (El reemplazante), Erto Pantoja, Alejandro Goic, entre otros. Todos empujan para darle verosimilitud al relato, algo fundamental al abordar un hecho mediático y que resuena hasta estos días.

“Tuvimos particular cuidado de no dejarnos llevar por ciertos estereotipos que se asocian a este tipo de crímenes. Queríamos representar la realidad precaria de Alto Hospicio, pero con dignidad”, afirma Videla, quien ya se encuentra trabajando en los primeros pasos de una segunda temporada de la serie junto a Sabatini (además de la serie sobre Pinochet que alista Invercine & Wood, Un simple soldado).

“Esta es la historia de cómo las jóvenes de Alto Hospicio fueron excluidas por la sociedad, vistas prácticamente como ciudadanas de segunda clase. Refleja un montón de males, principalmente el clasismo y la misoginia, temas que nos interesaba tocar”, finaliza.

Creditos a La Tercera