Un nuevo caso que causa vergüenza nacional es el rayado que realizó el ciudadano chileno, Cristobal Andrés Sandoval, de 21 años, en un tren de acercamiento a Machu Picchu, llamado Inca Rail.
El chileno fue sorprendido haciendo un graffiti de 1,50 por 2,20 metros aproximadamente, en el que se leía la palabra «Fuls». Cristobal fue detenido, con latas de pintura en aerosol en su mochila. Aún no se sabe cual será la sentencia por esta falta grave al patrimonio particular y daños materiales, ya que la fiscal María Huaca, dispuso la detención de Sandoval, durante el período que dure la investigación.
Por su parte el graffitero, alegó no tener conocimiento que esta práctica no se podía realizar, sobre todo porque él estaba acostumbrado a realizarlo. Este caso, tiene similitud al ocurrido en el año 2004, cuando dos chilenos rayaron un muro en la localidad del Cusco, los que tuvieron que pagar una multa de 100.000 dólares para reparar los daños al patrimonio del lugar, además de pasar seis meses en detención.