La declaración del Instituto Nacional de Derechos Humanos fue emitida por decisión del Consejo ante la situación que enfrenta el país.
La situación en el país, con hechos de violencia y movilizaciones sociales, así como la dictación del Estado de Emergencia en las principales ciudades del país, muestran una grave crisis para la población chilena. Todos y todas nos hemos visto afectadas e impactadas por estos hechos.
El INDH, desde el inicio de las manifestaciones el día 19 de octubre y en todo Chile, ha tomado contacto directo con mil 333 personas detenidas, siendo 181 niños, niñas o adolescentes, en 79 visitas a unidades policiales. Ha realizado 32 observaciones de manifestaciones; ha visitado recintos hospitalarios constatando 88 personas heridas con ocasión de la situación del país, con arma de fuego, con 5 personas graves y 1 con riesgo vital. El INDH, asimismo, ha interpuesto 12 querellas por denuncias de torturas y apremios ilegítimos, 1 amparo constitucional ante Corte de Apelaciones y 2 amparos ante Juez de Garantía. Los datos antes referidos se complementan con las cifras que otras organizaciones y servicios públicos han informado.
El INDH mira con preocupación la situación de niños, niñas y adolescentes expuestos directa e indirectamente a hechos de violencia; manifestantes, policías y militares expuestos a situaciones de riesgo; interrupción de servicios públicos, especialmente el transporte en la Región Metropolitana con la destrucción de estaciones del Metro de Santiago; la falta de respeto del derecho a la reunión pacífica y sin armas, en donde se ha observado el uso desproporcionado de la fuerza pública, tanto de Carabineros como de personal de las Fuerzas Armadas desplegadas; denuncias de comunicadores sociales agredidos y detenidos; cierre y saqueos de supermercados y otros establecimientos comerciales básicos para la población, lo que ha ocasionado dificultades para el desarrollo normal de la vida de muchas personas; cancelación de clases en establecimientos educacionales, con una especial afectación para los niños y niñas que reciben su ración alimenticia en dichos recintos. Se ha generado una sensación de inseguridad y temor en nuestro país, lo que afecta gravemente la convivencia democrática y el ejercicio de los Derechos Humanos reconocidos en la Constitución y en los Tratados Internacionales vigentes y ratificados por Chile.
Se hace imprescindible que todos los sectores de la sociedad contribuyan, con sus acciones y dichos, a un clima de paz, necesario para preservar el Estado Democrático de Derecho.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos, corporación autónoma de derecho público, encargada de proteger y promover los derechos humanos en nuestro país, hace un llamado a todos los sectores políticos y sociales a entablar un diálogo amplio que permita dar soluciones a las demandas sociales, para así reconstruir las confianzas y reparar la convivencia social pacífica.