Un verdadero caos se vivió en la sesión extraordinaria del Consejo Regional, donde pobladores, consejeros, alcaldes y la intendenta Claudia Rojas se enfrentaron acaloradamente por la aprobación del convenio de programación entre el Core y Serviu, el que involucra montos superiores a los 200 mil millones de pesos.
En la ocasión, los consejeros solicitaron realizar consultas a Contraloría e incluir los nombres de los proyectos que incluirá el acuerdo, lo que generó la furia de los asistentes que no dejaron hablar a las autoridades en todo momento.
La intendenta intentó explicar a la comunidad los detalles del convenio, algunos de sus anexos y la posibilidad de incorporar el proyecto Lobito, pero que para ello debe cambiar la denominación de dicho terreno, la cual hoy es rural.
Ante el hecho el alcalde de Iquique, Mauricio Soria se acercó a la mesa y procedió a gritar en múltiples oportunidades, siendo increpado por Claudia Rojas quien le pidió respeto, a lo que el edil hizo caso omiso.
De ahí en más los gritos, acusaciones, garabatos y ataques no permitieron continuar con la sesión. Los consejeros le pidieron al presidente de la entidad, Luis Carvajal, desalojar el salón, pero éste prefirió hacer un receso.
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