En el mes de mayo, se dictó la sentencia para Mauricio Ortega, pareja de Nabila Rifo como autor de los delitos de cuasi delito de homicidio y de lesiones graves gravísimas, siendo sentenciado a 26 años y 170 días de cárcel efectiva.
Eso fue considerado un triunfo en materias de violencia de género, porque era la primera vez que se veía que en un caso emblemático que un acusado pagaba por los delitos que se le imputaban.
Sin embargo, esto no terminó ahí, ya que, el abogado defensor de Mauricio Ortega, presentó un recurso de revocación de la sentencia, apelando a que el proceso habría sido viciado, desde el momento en que fue solicitado el testimonio de Ortega como testigo y no como imputado, hasta las pruebas presentadas.
El recurso ha sido revisado por la Corte Suprema de Santiago, en un juicio que ya lleva su segunda sesión.
Es más, esta solicitud no ha estado exenta de polémicas, ya que el abogado de Ortega, Ricardo Flores, señaló en un medio de la capital, que «habría salido, desde el punto de vista legal, más barato haberla matado que simplemente haberla dejado viva».