El día de ayer por la mañana recibimos una noticia que nos sorprendió a todos. El Papa Francisco vendría a Chile y pasará por Santiago, Temuco y nuestra ciudad de Iquique.
Desde que asumió un Papa Argentino, que se especuló de una posible visita a los países de Latinoamérica, pero eran solo eso, especulaciones.
Sin embargo, hoy fuimos informados y confirmados de que el Papa vendrá y no sólo a la ciudad capital si no que a otras dos ciudades incluyendo la nuestra, pero ¿Por qué?, digo, no es que sea algo malo la visita del máximo representante de la Iglesia Católica, pero por qué venir a Iquique, por qué a Temuco?
Hagamos un breve repaso por lo que fue la anterior visita del Papa a nuestro país. Era el año 1987, Chile ya llevaba 14 años de dictadura, la cual, venía en decadencia y sobre todo ya no contaba con apoyo internacional, por lo que la visita del Pontífice fue -y de eso ya es sabido- una solicitud de término del régimen.
Es más, durante el conmovedor discurso de Juan Pablo II en el Estadio Nacional, hubo disturbios protagonizados por carabineros y pobladores que venían a solicitar la ayuda del que era el máximo guía espiritual del mundo.
Desde esa visita ya han pasado 30 años, los que han significado el fallecimiento de Karol Wojtyła, la ascensión de Benedicto XVI, Joseph Ratzinger, quien hasta hoy se recuerda por su corto período a cargo de la Iglesia (2005 – 2013) y por tener fuertes lazos con la Alemania Nazi.
Es dentro de este contexto, en el que la cabeza de la Iglesia renuncia, las acusaciones de casos de pedofilia aumentan y la cantidad de fieles disminuye, es que Jorge Mario Bergoglio asume esta pesada mochila de responsabilidades.
Entones, volvamos a la pregunta original, por qué Chile y por qué estas ciudades?. Quiero que quede claro que las hipótesis que presentaré a continuación son solo eso, hipótesis, las que representan una real inquietud.
Una primera respuesta, y la más ingenua a mi parecer, es pensar que viene porque estas ciudades son muy católicas, considerando las festividades y celebraciones que conmemoramos en torno a las imágenes de los santos de la Iglesia Católica. Sin embargo, esa hipótesis no respondería el porqué de las otras dos ciudades, Santiago y Temuco.
Pues bien, planteemos otra. Si consideramos que la visita del Papa anterior fue en un contexto de reconciliación y búsqueda de paz social, por qué no pensar que ahora puede ser lo mismo?. Por ejemplo, Temuco es la ciudad principal de la región del Bíobio, región que ha estado marcada por las confrontaciones violentas entre el Estado de Chile, representada en el poder coercitivo de Carabineros y el pueblo Mapuche. Iquique, por su parte, ha sido escenario de confrontaciones indirectas y directas con nuestro país vecino, Bolivia.
Y Santiago, porque obvio, es la ciudad capital y ahí se encuentran concentrados los poderes políticos, económicos y religiosos que comandan nuestro país.
Entonces podemos pensar que esta visita es una visita que implica la búsqueda de reconciliación?
Ahora bien, existe una tercera, pero que no es excluyente de la segunda, que sería el hecho que el Papa anda de gira con el fin de repartir la palabra y reencantar a aquellos fieles que con los años han dejado de creer en la Iglesia como institución.
Finalmente, me saltan algunas otras preguntas que sólo podremos contestar cuando Francisco aterrice en territorio nacional, entre ellas, ¿Reconocerá los casos de pedofilia en los que se han visto envueltos los sacerdotes chilenos?, ¿Aceptará el poder femenino que ha ganado fuerza en nuestro país?, ¿Aportará con algo en la pelea en contra de la pobreza y la desigualdad social?, ¿Cual será su reacción al ver que Chile está cambiando en materias de igualdad con la comunidad homosexual?, ¿Demostrará por qué es llamado «El Papa del pueblo?
Esperamos poder responder todas estas preguntas.
Patricia Escobar