- Trabajadores del municipio local y Cormudespa toman curso, para poder atender necesidades de personas sordas que lleguen a sus oficinas.
Una treintena de funcionarios de las áreas de Salud, Educación, Cesfam y la municipalidad de Pozo Almonte se capacitaron en la lengua de señas chilena, con el fin de mejorar la atención que entregan y poder atender de manera más expedita y correcta los requerimientos que presenten las persona en esta situación de discapacidad.
“La verdad es que nos sirve mucho efectuar este curso, porque con esto podemos comunicarnos mejor con las personas que vienen a hacer trámites a la municipalidad y podemos entender su nombre y qué es lo que necesitan. También se nos enseña a ver las cosas de manera distinta, para que si no sabes algo, puedas hacer la mímica y hacerte entender”, dijo Marcelo Araya, uno de los partícipes en el curso.
Entre las cosas que se enseñaron en el taller estuvo el abecedario en lengua de señas, los signos de los animales, presentarse y despedirse, explicar situaciones, lo que uno efectúa en la mañana, situaciones cotidianas y cómo manifestarlas a un sordo, entre otras.
“Nuestra idea como municipalidad es que todo el aparato público que manejamos, ya sean los colegios, la salud y la atención de público, tenga accesibilidad universal. Esa es nuestra meta que toda la gente pueda hacer un trámite y sea escuchada y entendida, puesto que la inclusión es algo que en este periodo queremos dejar como huella y, esperamos, que otros servicios las puedan replicar.
El taller de lengua de señas se realizó gracias al “Convenio Estrategia de Desarrollo Local Inclusivo”, que se adjudicó la municipalidad de Pozo Almonte el 2016, por el Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis), que tiene una duración de 18 meses, y que busca crear una política de inclusión en las dependencias de la casa edilicia.
La monitora de los talleres es Karen Calvo, quien es certificada por LenSe en Legua de Señas chilena.